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Trabajar uniendo fuerzas con otros productores dentro de una asociación genera múltiples beneficios. Entre estos resalta la posibilidad de mejorar tus ingresos y hacer que tu negocio tenga un mayor tiempo de vida.
En la actualidad, es indispensable innovar para competir en el mercado, por lo que trabajar asociativamente permite a los productores acceder a tecnología que los hagan más competitivos. Pueden, por ejemplo, adquirir equipos modernos de uso mancomunado, lograr la evolución de técnicas tradicionales y generar nuevos servicios productivos.
La asociatividad (un mecanismo de alianza y cooperación) también te permite, como agricultor o ganadero, ingresar en una economía de escala. De esta manera se abre la posibilidad de reducir los costos de la producción. El Ministerio de Agricultura y Riego resalta que la asociatividad facilita el acceso a información del mercado para tomar decisiones de inversión, así como asesorías en temas productivos o administrativos.
De otro lado, gracias a la asociatividad, puedes acceder a créditos con menores tasas de interés y mejorar tu capacidad de negociación en cuanto a las condiciones y a los precios de comercialización.
La decisión de asociarse implica establecer una relación de confianza mutua. Por ello, es importante estar seguro de quiénes serán los posibles socios y así evitar el quiebre del acuerdo. De otro lado, los beneficios, sin duda, conducen a una mayor prosperidad y desarrollo para todos los productores.
Fuente: peru21.pe
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