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Foto: diariocorreo.pe |
El reciclaje es una actividad que no solo cumple un papel importante en la conservación del planeta, sino también ocupa a miles de personas en el país. La crisis del coronavirus obligó a parar a esta industria, por lo que su reactivación genera grandes expectativas.
Así, el Ministerio del Ambiente aprobó el “Protocolo sanitario para la operación ante el COVID-19 del Servicio de Reciclaje” y los “Criterios de focalización territorial y la obligatoriedad de informar incidencias”, que permitirá la reactivación gradual de la actividad de reciclaje en el país, según la asociación civil Recíclame Cumple Con Tu Planeta.
En ese sentido, el representante de Recíclame, Renzo Gomero, señaló que la cuarentena obligó a la industria del reciclaje a detener sus actividades. Sin embargo, resaltó las propuestas realizadas para su reactivación.
“A pesar de que la coyuntura obligó a la industria de reciclaje a detenerse, junto a los demás sectores productivos del país, eso no significó cruzarse de brazos, al contrario, conllevó al Ministerio del Ambiente y los diferentes actores de la cadena de reciclaje, a seguir uniendo esfuerzos para sacar adelante nuevas propuestas, como el plan de reactivación, el mismo que contó con el aporte de Recíclame”, señaló Gomero.
Precisó que la medida permitirá la reactivación progresiva del sistema de reciclaje en el país y la priorización y monitoreo de la salud de las personas involucradas en dichas actividades y, a la vez, promoverá la formalización de la cadena de valor.
“El camino de recuperación no va a ser inmediato, pero se espera que sea sostenible al promover la formalización de la cadena. Como Recíclame promovemos la gestión de residuos bajo el enfoque de economía circular, buscando el compromiso no solo del sector privado, sino de todos los actores de la cadena", explicó.
Por último, agregó que, antes de la paralización de actividades, en el Perú se generaba 20 mil toneladas de residuos sólidos municipales al día, principalmente de los hogares, de los cuales se valorizaba aproximadamente el 1%, el resto terminaba en rellenos sanitarios, botaderos o en el ambiente.
Fuente: diariocorreo.pe
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