EE. UU.: Las uvas de Perú llegan a Savannah

Esta temporada han llegado a Savannah, Georgia, las uvas de Perú, primera vez que el puerto recibe este producto peruano. Las uvas, que empezaron a llegar en noviembre, forma parte de una serie de productos que están convirtiendo al puerto rápidamente en una importante puerta de entrada en el sudeste para las frutas y hortalizas frescas, así como para otros perecederos.

"Ya recibíamos aguacates, cítricos y una gran porción de cebollas dulces peruanas en otoño", apunta Chris Logan de la Autoridad Portuaria de Georgia. "Ahora, con las primeras Red Globe peruanas, recibimos todos los líderes de la categoría de Perú". El objetivo es posicionar Savannah como una alternativa rápida y rentable a los puertos del noreste y del sur de Florida para los exportadores que quieran que sus productos entren en el sudeste.

"Savannah es el cuarto mayor puerto de contenedores por detrás de Los Ángeles, Long Beach y Nueva York", indica Logan. "Por tanto, es el corredor más eficaz para abastecer a los mercados mayoristas y minoristas de Atlanta y otros mercados importantes del sudeste. Un gran elemento de nuestra propuesta de valor es el ahorro de costes en el transporte hacia el interior en comparación con llegar al noreste y viajar en camión al sur o con llegar al sur de Florida y viajar al norte. El ahorro por contenedor es de mil dólares, si no más". La propia Autoridad Portuaria es quien posee y opera el puerto, por lo que otra ventaja es la relación directa de trabajo que se ha creado entre importadores, exportadores y proveedores de servicios.

"Nuestra estrategia no es solo lidiar con operadores marítimos, sino con importadores, exportadores y propietarios de la carga, quienes, en última instancia, dictan la ruta de la mercancía", apunta Logan. La estrategia ya está generando dividendos, y pronto se abrirán unas grandes instalaciones construidas a propósito, que se situarán a 24 kilómetros del puerto y que ofrecerán servicios complementarios a los expedidores, como instalaciones frigoríficas donde se pueden llevar a cabo tareas de reenvasado, fumigación y desconsolidación de la carga perecedera. Logan llama a esa parte "el eslabón perdido" que convertirá el puerto en destino favorito para la mercancía perecedera contenerizada.

Por ahora, la cantidad de uvas que hacen el viaje de 17 días de Perú a Savannah es relativamente pequeña. No obstante, Logan opina que el volumen de uvas, así como el de otras frutas y hortalizas frescas, no hará más que crecer a medida que se hagan más patentes las ventajas del puerto. También cree que los productos chilenos y centroamericanos llegarán con más frecuencia al puerto.

"Hemos trabajado con aduanas y con el USDA para garantizar que las capacidades de inspección estén en orden para poder descargar un buque, inspeccionar la carga y darle salida en seis horas", afirma Logan. "Confiamos en que el enorme éxito que hemos tenido en la recepción de perecederos fomentará la llegada de más perecederos en el futuro".

Fuente: Freshplaza.es