La filosofía del ‘slow food’ llegará este año a Mistura

Petrini. Ha sido galardonado por su organización.

De interés. Carlos Petrini, fundador del movimiento, expondrá sobre importancia de comer sano y con conciencia.

A la comida rápida (fast food) ya le salió competencia: el slow food. Esta filosofía de vida la fundó en 1989 Carlos Petrini, un italiano que pretende que los consumidores de alimentos tomen conciencia de todo el proceso que implica llevarse el alimento a la boca.

Pietrini será el invitado estelar de la feria gastronómica Mistura 2014 que, en esta edición, tiene como lema 'Come rico, come sano, come peruano". Y bueno, ¿qué mejor individuo que represente ese ideal que Petrini?

Al respecto, la Asociación Peruana de Gastronomía (Apega) también aprovechará para firmar con Petrini un acuerdo para fomentar la alimentación sana aprovechando nuestros productos y la promoción de biodiversidad nacional.

Escape de la monotonía
Todo nació en 1986, cuando el primer local de McDonalds en Italia se instaló en la Plaza España de Roma. Entonces un grupo de periodistas organizaron un copioso banquete en respuesta contra la industrialización de los alimentos que implica la comida rápida.

“Escapar de la monotonía y la uniformidad de la comida rápida nos permitiría redescubrir la riqueza y variedad de las gastronomías locales", reza uno de los primeros párrafos del manifiesto del 'slow food'.

Un punto importante del 'slow food' es que no solo vela por el buen estado del consumidor sino que también se impliquen otros aspectos de nuestra vida como la cultura, la política, la economía y, por supuesto, el medio ambiente.

Y el movimiento adquirió rápida aceptación, en la actualidad lo profesan personas en 130 países de los cinco continentes. Hace una década, la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura (FAO) la consideró como una organización sin fines de lucro.

Por ejemplo, entre los proyecto del movimiento se encuentran el Arca del Sabor que se encarga de catalogar alimentos que se producen a pequeña escala, pero que están en peligro de extinción. Hasta la fecha ya están registrados unos 1.519 productos. Otro, por ejemplo, es el Baluarte en el que se capacita a agricultores artesanales para preservar sus técnicas tradicionales con los que se ha logrado mantener unos 350 productos.

Fuente: http://www.larepublica.pe/24-08-2014...-ano-a-mistura