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El “ungurahui” (Oenocarpus bataua Mart) es una palmera amazónica considerada como una fuente de proteína de muy alto valor, comparable con la carne o con la leche. La pulpa de la fruta es rica en lípidos, proteínas y vitaminas. La bebida preparada con la pulpa aplastada en agua y tamizada, conocida como chapo de “ungurahui”, tiene un alto valor nutritivo y energético. Es visto como una alternativa de producción al aceite de oliva, pues su perfil de ácidos grasos es muy similar.
Dos investigadores de la Universidad Nacional de la Amazonía Peruana (UNAP), han realizado un estudio para determinar la asociación entre la altura y diámetro de las plantas de “ungurahui” con la producción de frutos en las localidades de Mishana y San Martín, río Nanay, Loreto. Los resultados indican que la relación altura total-producción de frutos de las plantas de “ungurahui”, se ajustó al modelo matemático de distribución de tipo cúbico, al igual que la relación diámetro-producción de frutos; en ambos casos, con un excelente grado de asociación y un excelente coeficiente de determinación.
La investigación sobre este importante recurso natural amazónico se ha realizado utilizando la alometría, que es una herramienta que permite relacionar características físicas y fisiológicas de las especies forestales para predecir su comportamiento en el futuro, permitiendo obtener parámetros de interés para investigadores y planificadores de sistemas de aprovechamiento intensivo de los recursos naturales.
Es decir, servirá para definir y respaldar iniciativas y políticas relacionadas a planes de ordenación, funcionamiento de ecosistemas y manejo de bosques, de acuerdo a lo señalado por los autores Jorge Elías Alván Ruiz y Vicky Ann Dávila Rojas de la Facultad de Ciencias Forestales de la UNAP.
En las últimas dos décadas, la conservación de los bosques tropicales se ha enfocado en el aprovechamiento sostenible de los productos y servicios que oferta el bosque. En esta perspectiva, los recursos forestales no maderables han concitado la atención de los emprendedores de iniciativas de conservación, ya que constituyen una oportunidad de desarrollar estrategias que generen beneficios económicos a las poblaciones locales sin comprometer el funcionamiento del ecosistema.
Los ácidos grasos poliinsaturados linoleico y linolénico, que contiene el “ungurahui”, ayudan a proteger el aparato cardiovascular y a contrarrestar inflamaciones. Debido a su contenido de ácido omega 9, resulta un buen revitalizador del cabello, dándole brillo y evitando su caída, siendo también efectivo en el cuidado de la piel y en la reparación de tejidos.
El estudio está a disposición del público interesado en el siguiente enlace: https://revistas.unapiquitos.edu.pe/...ticle/view/130
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